Pintor de aeronaves, nueva profesión en Mallorca

17 NOV 2017

Un grupo de 24 alumnos se está formando en la Cámara de Comercio para convertirse en pintores de aeronaves, una profesión que podrá ejercerse en Mallorca a partir de enero, con la implantación de la empresa asturiana SEM, la única de toda España que ofrece este servicio a las compañías aéreas.

Un grupo de 24 alumnos ha empezado a formarse como pintor de aeronaves, en el marco del Programa PICE - Garantía Juvenil gestionado por la Cámara de Comercio de Mallorca. Es la primera vez que se ofrece este programa de formación y nace de la voluntad expresa de poder dar respuesta a una necesidad real del mercado laboral.

La empresa asturiana Grupo SEM, especializada en recubrimientos de todo tipo desde los años 50, se ha instalado en el aeropuerto de Palma para empezar un nuevo proyecto. Ya han empezado a reformar el antiguo hangar de Spanair para reconvertirlo en un taller de mantenimiento de aeronaves, con la singularidad de que harán también el pintado de los aviones, un servicio que no se ofrece en ningún otro aeropuerto español.

Oportunidad de incorporación y desarrollo profesional
Según las previsiones de la empresa, se empezará a operar en enero de 2018 y se pretende alcanzar los 40 trabajadores a lo largo del año. Cuentan ya con técnicos expertos en plantilla pero necesitan chicos y chicas para desarrollar un equipo base que se adapte al perfil requerido. Al tratarse de una actividad tan concreta y nueva en la isla, deben previamente formar jóvenes, que en algunos casos, ya tienen experiencia en pinturas pero del sector marítimo o del sector automoción.

El presidente del Grupo SEM, Félix Baragaño, acompañado del presidente de la Cámara de Comercio de Mallorca, José Luis Roses, han tenido la oportunidad de conocer al grupo de alumnos que el día 2 de noviembre empezó este curso. Una vez finalizado, los chicos deberán pasar los exámenes y también un proceso de selección por parte de la empresa.

Los cursos PICE de la Cámara de Mallorca están dirigidos a jóvenes menores de 30 años que ni estudian ni trabajan y que están inscritos en Garantía Juvenil. La formación siempre se compone de unas horas troncales para mejorar habilidades sociales, competencias digitales e idiomas y de horas de formación específica para cualificarles en la profesión.